Los vecinos del entorno de La Macarena están hartos y así lo han hecho saber, una vez más, al compartir unas imágenes en las que se ve basura, restos orgánicos y animales muertos en la calle Basílica. El enclave, que se encuentra cerca de un centro de educación especial, al que diariamente acuden menores, se encontraba este martes repleto de basura, cartones, e incluso un gato muerto. Los restos, además, dificultaban el paso a los viandantes al encontrarse en mitad del acerado.
Según cuentan los vecinos, esta acumulación de basura en la calle Basílica vendría de un «verdadero campamento» que algunas personas instalan en la acera para pasar la noche. La organización asegura que dejan «basura, orines» y que «no es justo para nadie».
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