El PP ha criticado que el gobierno municipal de Alcalá en un acto de “total irresponsabilidad”, agota plazos para imponer su criterio respecto al futuro del servicio de recaudación.
En una nota, los populares han informado que después de que hayan anunciado que no aprobarían la decisión unilateral del gobierno de ceder el servicio de recaudación municipal a la Diputación, se ha convocado ”in extremis” una mesa de negociación para este martes en la que el Partido Popular de Alcalá de Guadaíra ya ha lanzado una advertencia al alcalde, “el futuro de ARCA será consensuado” .
En este sentido, Mª Carmen R. Hornillo ha querido recalcar que en Alcalá ya se acabaron las imposiciones y las decisiones unipersonales de Gutiérrez Limones, y que ha llegado la hora del diálogo y de los acuerdos, “le guste o no al Sr. Alcalde”.
Desde el PP, esperan que la convocatoria de esta mesa de negociación sea fruto de la sincera intención del gobierno para alcanzar un acuerdo aun cuando apenas queda tiempo, y no, “para disfrazar con una falsa negociación, la imposición del criterio del alcalde”.
El pasado mes de noviembre, el equipo de gobierno en solitario, decidió que el próximo 31 de diciembre, finalizaría el contrato de gestión con CGI y ceder el servicio de recaudación a la Diputación, según el PP, desde entonces, “y si verdaderamente el gobierno tiene la voluntad de buscar consensos”, ha tenido tiempo de sobra para negociar con la oposición, sin embargo, ha dejado pasar el tiempo.
Mª Carmen R. Hornillo, presidenta del PP alcalareño, ha señalado que detrás de este clásico “modus operandi” de Gutiérrez Limones, suele esconderse una sucia estrategia para tratar de imponer su criterio, así, agotando fechas, y sin apenas tiempo para plantear otras opciones, “trata de empujar al resto de partidos a que avalen su decisión o les acusará de no dejarle gobernar”.
Según los populares, el alcalde está “echando un pulso” a toda la oposición y es capaz de dejar colapsada la ciudad sin los servicios de recaudación operativos con tal de imponer su decisión, con esta actitud, el alcalde demuestra que su egocentrismo puede conducirle a cometer actos de tamaña irresponsabilidad.
“Mucho nos tememos”, ha manifestado la presidenta de los populares, “que esta mesa de negociación forme parte del típico juego sucio de Limones, aún así, acudiremos porque Alcalá nos importa y nos duele, y no dejaremos que el alcalde la use como moneda de cambio para ver satisfechas sus pretensiones”.
Por último, el grupo municipal popular quiere dejar meridianamente claro que la decisión del alcalde de ceder la recaudación al OPAEF es básicamente por la necesidad de liquidez inmediata, una liquidez que el alcalde precisa para sostener su política “clientelar” y de “captación” de “estómagos agradecidos”, y todo, a pesar de que se hipoteque más aún la economía del Ayuntamiento.