Con alusiones a la unidad de España, al diálogo y al interés general, el Rey ha dado su tradicional mensaje navideño desde el Palacio Real, “como símbolo de los españoles”.
Por primera vez desde el Palacio Real de Madrid, el rey de España, Felipe VI, ha dado su tradicional mensaje navideño con claras referencias a la política, la economía, los derechos sociales o el papel de España en el mundo.
Así, Felipe VI ha explicado que este año el mensaje se ha realizado desde el Palacio Real “como un símbolo de los españoles y que está abierto a todos. En todo su patrimonio se recogen siglos de nuestra historia común y eso nos ayuda a entender nuestro presente y orientar nuestro futuro. Porque la historia define y explica nuestra identidad”.
En el mensaje navideño, plagado de alusiones a la unidad y a la identidad como españoles, Felipe VI ha dicho que “vivimos tiempos en los que es necesarios reconocer lo que nos une. Poner en valor lo que hemos construido juntos con sacrificios y generosidad y ensalzar lo que somos” en clara referencia a la situación independentista de Cataluña.
Asimismo, el Rey ha aludido a que en la Constitución “caben todas las formas de sentirse español” al tiempo que ha señalado “la misma realidad histórica, actual y de futuro” de un país “tejido por pensadores, científicos, creadores y tantos hombres y mujeres”, insistiendo en que España “es también un gran estado, cuya solidez se basa en principios constitucionales y reglas que nos hemos dado”.
Para el Rey y en alusión a las Elecciones Generales del pasado domingo, ha defendido la necesidad de “fortalecer la cohesión nacional” para impulsar “nuestro progreso y nuestro proyecto común de pervivencia. Lo que nos debe importar, ante todo es España y el interés general” ha apuntado.
Sobre la irrupción de nuevas formaciones políticas, Felipe VI ha expresado que “la pluralidad aporta sensibilidades y realidades políticas diferentes. Con la finalidad de tomar las mejores decisiones” al tiempo que ha dicho que “iniciamos una nueva legislatura que requiere todos los esfuerzos para asegurar y consolidar lo conseguido en las últimas décadas y adecuar nuestro progreso político a la España de hoy” para lo que es necesario según él que las instituciones “caminen al mismo paso del pueblo”.
Felipe VI ha defendido que la España actual “es distinta a la de los siglos que nos preceden gracias a un sincero espíritu de reconciliación” y de anteponer los intereses generales “por encima de todo”. El Rey ha apelado al espíritu de la Transición a la que ha calificado como “gran lección de la España reciente que nunca debeos olvidar” frente a “la ruptura de la ley y la imposición de las ideas de uno por encima de todos”.
“Nuestro camino es de forma irrenunciable el del entendimiento. Respetar nuestro orden constitucional es defender la convivencia democrática de todo el pueblo español y también defender nuestra diversidad”.
El Jefe del Estado se ha pronunciado expresando que la mejora de economía “es una prioridad para todos” porque todos “deseamos un crecimiento económico sostenido que cree empleo digno, fortalezca los servicios públicos esenciales y reduzca las desigualdades acentuadas por la crisis”.
Respecto a la Unión Europea, el monarca ha definido Europa como “una de nuestras grandes realidades con grandes desafíos en su seno”, tras mencionar los atentados de París, las muertes en Siria, o el drama de la inmigración. También ha recordado que “la voz de España se ha de oír porque el mundo de hoy exige naciones fuertes, responsables, unidas, solidarias y leales con sus socios internacionales”.
Para Felipe VI “a los españoles de hoy nos corresponde escribir la historia de nuestro tiempo y debemos hacerlo contando con todos. […] Tengamos fe y creamos en nuestro país. Tenemos una capacidad de superación mucho mayor de lo que pensamos. La fortaleza de España está en nosotros mismos. Los españoles nunca nos hemos rendido ante las dificultades y siempre las hemos vencido”.
Por último el Rey ha apelado al diálogo y el compromiso, al sentido del deber y a la responsabilidad. “Hace décadas el pueblo español decidió darse la mano y no la espalda. Hagámoslo orgullosos de lo que hemos hecho juntos y de lo que vamos a conseguir” ha finalizado antes de felicitar las fiestas.