Después de que el alcalde de Sevilla, José Luis Sanz, anunciara la aprobación de la «primera licencia de obras de construcción» para el proyecto impulsado por el grupo KKH destinado a revitalizar la antigua planta tabaquera de Altadis en Los Remedios, el Partido Socialista (PSOE) ha respondido afirmando que las primeras obras ya comenzaron «en mayo».
Mientras que la licencia se refiere al nuevo edificio que albergará un futuro hotel de primera categoría junto con espacios privados y públicos en el emblemático edificio de la planta, conocido como «el cubo», una plaza pública, áreas culturales y comunitarias en otros edificios de la antigua fábrica, y una pasarela que conectará el lugar con la avenida de Roma al otro lado del río, la concejala socialista Encarnación Aguilar ha argumentado que las obras en el interior de la antigua fábrica «se iniciaron en mayo y no ahora, como sugiere Sanz. Además, entre marzo y abril, ya se llevaron a cabo tareas previas en el exterior, incluida la limpieza y adecuación del talud adyacente».
Aguilar ha criticado la actitud de Sanz, afirmando que es «sumamente cínico» que él presuma de la licencia de obras, cuando en realidad las obras en el interior comenzaron hace tres meses y en el exterior hace cinco meses. Ella argumenta que Sanz está tratando de presentar un proyecto que ya estaba en marcha bajo la administración anterior del alcalde socialista Antonio Muñoz como un desbloqueo por parte de su gobierno. También acusa al PSOE de haber «paralizado» esta iniciativa durante años.
En opinión de Aguilar, Sanz está utilizando un argumento «banal y falso», el inicio de las obras de construcción, para justificar su cambio de posición con respecto al proyecto, simplemente porque fue iniciado bajo el liderazgo del Partido Socialista. Además, respecto al proyecto de la pasarela, que fue desfavorecido por la Comisión Provincial de Patrimonio de Sevilla en julio debido a su impacto en la percepción histórica del Palacio de San Telmo desde el río, Aguilar acusa a Sanz de paralizar la pasarela debido a sus preferencias personales, afirmando que «no le gusta».
Aguilar concluye afirmando que Sanz está tratando de reescribir la historia debido a su dificultad para manejar las rectificaciones en su gestión, comparando su situación con la del exalcalde Juan Ignacio Zoido, quien inicialmente se opuso a la Torre Sevilla durante su campaña electoral pero luego la apoyó como alcalde.