Estudiantes de la Acampada por Palestina que llevan cuatro semanas instalados en el césped de la Universidad de Sevilla han ocupado este lunes el decanato de filología de la US. Tal y como han relatado en un comunicado, «durante la entrada, la seguridad privada ha herido a una compañera que ha tenido que ir a urgencias». Esta no habría sido la única agresión, ya que aseguran que «la policía nacional ha accedido a la puerta del decanato y ha agredido a un compañero».
El motivo por el que han ocupado el rectorado, sentencian, es para «forzar al rector a romper su silencio y escuchar la voz del estudiantado que no está dispuesto a consentir la complicidad de la universidad con el genocidio». «Nuestro encierro será indefinido e, igual que la Acampada, se mantendrá hasta conseguir un avance tangible en la lucha por nuestros objetivos».
Para lo estudiantes, esta ocupación es «una nueva escalada de la presión social al equipo rectoral, cuya única respuesta a nuestra invitación a una reunión ha sido el silencio», reprochan. La plataforma envió «dos correos, solicitando una audiencia para trasladarles nuestras reivindicaciones», pero «nunca recibimos respuesta».
Rotura de relaciones de la US con Israel
El pasado mes de mayo, el rector Miguel Ángel Castro Arroyo, anunció que la US suspendería las relaciones con Israel. Los alumnos señalan que «solo se suspendieron temporalmente las relaciones con dos universidades israelíes hasta que estas se comprometieran con la paz, una condición que carece de criterios claros y no garantiza una interrupción duradera de los vínculos académicos».
«Como si fuera poco, el rector se niega a nombrar el genocidio contra el pueblo palestino como tal y sigue hablando de un conflicto, como si se tratara de una guerra entre iguales. No se ha hecho mención alguna a las relaciones de US con empresas y entidades financieras patrocinadoras del genocidio como el banco Santander», critican.
Los acampados han calificado estas medidas como «insuficientes» y han denunciado además el «intento de desinformación» del rector a la hora de difundir una «falsa imagen» de ruptura de relaciones. Por ello, han pedido el «cese definitivo de cualquier vínculo institucional de la US con universidades israelíes y empresas privadas que financien la violencia contra la población palestina».