La jueza del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Coria del Río ha ordenado nuevamente prisión provisional, comunicada y sin fianza para un hombre por quebrantar la orden de alejamiento sobre su hija. El varón está investigado, junto a su esposa, por presuntas amenazas y coacciones hacia su hija mayor, de 19 años. Además, el hombre está acusado de presunta agresión sexual continuada contra la joven.
La hija denunció a su padre por maltrato y agresión sexual después de que su madre, inicialmente, también presentara una denuncia contra él, aunque luego la retiró. Como medida cautelar, el juzgado había impuesto al hombre una orden de alejamiento y prohibición de contacto con su hija mayor, advirtiendo que cualquier incumplimiento sería considerado un delito adicional.
Incumplimientos reiterados
El juzgado señala que el hombre ha violado la orden de alejamiento en varias ocasiones, utilizando estas oportunidades para presuntamente coaccionar a su hija y presionarla para que retire la denuncia, incluso diciéndole que solo podrá ver a su hermana menor si lo hace. Según la joven, el hombre aprovecha las llamadas que ella hace a su madre para interferir y comunicarse con ella, a pesar de la prohibición.
Aunque el acusado niega haberse puesto en contacto con su hija o haberla amenazado, las conversaciones presentadas por la denunciante demuestran lo contrario. Además, aunque el hombre aseguró tener pruebas en su teléfono que respaldan su versión, no pudo mostrarlas cuando se le solicitaron.
Decisión del juzgado
Dado que el hombre continúa quebrantando la medida cautelar y contactando con la víctima, la jueza ha considerado necesario endurecer las restricciones. Por ello, ha dictado su ingreso en prisión provisional para proteger la seguridad, el bienestar y la salud mental de la joven. Esta decisión busca garantizar que el acusado no pueda seguir ejerciendo presión ni poniendo en riesgo a la denunciante.