Educación se ha referido las protestas en el IES Bajo Guadalquivir en Lebrija que causaron la dimisión de su directora, tras la agresión a un docente, donde defiende la actuación de la Inspección Educativa y hace un «llamamiento a la calma».
La Delegación Territorial de Educación se ha referido en un comunicado a la situación vivida la semana pasada en el IES Bajp Guadalquivir de Lebrija, donde su directora Eva María Ávila presentó su dimisión el pasado 8 de febrero  tras la presión estudiantil y protestas en apoyo a un profesor que fue agredido y cuyos atacantes no fueron sancionados.
En el comunicado, la Junta defiende que el instituto ya ha restablecido «su normal funcionamiento con el nombramiento de una nueva dirección», así como que la Inspección Educativa actuó «desde que se tuvo conocimiento» de los incidentes «ejerciendo as funciones y atribuciones que le están encomendadas, llevando a cabo las actuaciones necesarias, así como la supervisión y el asesoramiento a la comunidad educativa in situ«, puesto que tres inspectores visitaron el centro varios días después de lo sucedido. Por último, Educación ha hecho un «llamamiento a la calma a toda la comunidad educativa y del municipio de Lebrija», ya que, insiste el comunicado, «la actividad es de absoluta normalidad».
La reacción de Educación llega después de que el pasado 8 de febrero dimitiera como directora Eva María Ávila «en nombre de todo el equipo directivo».  La situación generada en las últimas dos semanas en el Instituto, plagadas de protestas y paros protagonizados por los alumnos en apoyo a un profesor agredido en clase, sin que los presuntos agresores hayan sufrido medidas disciplinarias tras estos hechos.

El documento de dimisión comunicaba a la consejería y a la ciudadanía de Lebrija que dejaba su cargo. La agresión sufrida por el docente ha sido «la gota que ha colmado el vaso»  ya que esta situación, según algunos profesores, se lleva viviendo desde principios de curso.

l 31 de enero un profesor de carpintería  fue agredido por parte de dos alumnos. Los estudiantes le habían propinado un golpe en la cabeza con un tarugo de madera. 60 de los 80 profesores del centro se movilizaron al día siguiente por “las continuas actitudes de desconsideración, ofensas, resistencia activa, coacciones, vejaciones y conductas disruptivas que viene realizando desde el inicio del presente curso el alumnado del segundo curso de FPB de Carpintería hacia su tutor y el equipo docente” según recoge el comunicado de los manifestantes.

Las peticiones de los profesores era buscar a los autores, suspenderlos de forma inmediata del derecho a asistir a clase y el cambio de centro si fuera necesario. También exigían que se active el protocolo de actuación en caso de agresión al profesorado y se agilicen los procedimientos de «corrección de conductas contrarias y gravemente perjudiciales para la convivencia, aplicándose las sanciones adecuadas en los momentos oportunos para que no lleguen a producirse» este tipo de circunstancias.

El martes 6 los alumnos se amotinaron en el instituto pidiendo la dimisión de la directora del centro, Eva María Ávila. Con esta protesta los estudiantes han mostrado su apoyo tanto al profesor de segundo de FPB Carpintería que fue agredido, como al docente que promovió la concentración de profesores y alumnos en protesta por esas agresiones que tuvo lugar el pasado 1 de febrero. presidente de la Asociación de Profesores de Institutos de Andalucía (APIA), Javier Puerto, aclara que las quejas contra la directora son porque “Los estudiantes han entendido que la dirección del instituto ha hablado con algunos padres de los alumnos que apoyaron la concentración del 1 de febrero para que denunciaran al profesor que la promovió por injurias a sus hijos”