Francisco Rubio, portavoz andalucista, advierte que la calle Bailén, “por muchas aceras que le pongamos, no va a perder el carácter de principal vía de distribución del tráfico. En la actualidad distribuye entre el noreste y el sureste del núcleo urbano y articula la movilidad, rodeando el Centro de Alcalá. Es una vía vital por la complicada orografía de Alcalá y los establecimientos que allí se ubican o bien se enfocan a los vehículos (talleres, concesionarios) o dependen de la facilidad de acceder con coche”.
El Partido Andalucista si bien apuesta por humanizar dicha vía haciéndola más agradable al ciudadano, no quiere desaprovechar en acerados de granito poco acogedores miles de metros cuadrados, en los que se podrían crear aparcamientos en cordón, que mejorarían el acceso al cercano Centro de Alcalá que en pocos meses será peatonal.
Francisco Rubio critica que no se distingan en Alcalá las jerarquías de las calles, convirtiendo Bailén en una calle urbana más; como la Plata, Sor Petra o San José, obviando que actualmente, y por mucho que queramos engañarnos, es la verdadera travesía de Alcalá. Por otro lado, consideran los andalucistas, que la calle Bailén, debido al desnivel tan importante que presenta, es poco usada para pasear.
Para Francisco Rubio, “se está perdiendo la oportunidad de configurar en algunos sitios de la calle aparcamientos en batería, con mayores rendimientos que la disposición en cordón, en una zona donde faltan aparcamientos. Precisamente según Rubio, esto motivó la firma de un convenio con propietarios del en la antigua discoteca Ruedo, para habilitar un aparcamiento público. El retraso “sine die” de este proyecto hace más necesario aún la ampliación de aparcamientos en la calle Bailén.”
“También nos preocupa” –argumenta Rubio- “que la calzada quede excesivamente estrecha y pueda dificultar la evacuación o rápida intervención en casos de urgencia, como ya ocurre en zonas como la Plaza San Mateo o el Callejón del Huerto”.
Cabe recordar que la calle Bailén es la única alternativa viaria al Centro de Alcalá, que en unos meses estará peatonalizado al completo, sacando los coches, de forma que se hace absolutamente necesaria la creación de nuevos aparcamiento en las vías circundantes al centro, que permitan la llegada del ciudadano, que actualmente no cuenta con opciones suficientes. Esto sería una medida que ayudaría al mantenimiento del maltrecho comercio del centro.
Para Francisco Rubio, “Limones continúa así creando un magnífico decorado de cine, perfectamente agradable a la vista, pero absolutamente incómodo y poco práctico para la vida diaria de los alcalareños”.