Hoy se firma el contrato tras la adjudicación de esta intervención que se realiza con cargo al 1% cultural del Ministerio de Fomento. Las obras empezarán ahora pese a anunciar hace un año que lo harían tras el verano. Con esta actuación se recuperará el estado original de una de las señas del patrimonio histórico de Alcalá cuya construcción es posterior al siglo XV, pero con vestigios romanos.
Hoy se firma el contrato de obras de la rehabilitación del histórico puente Carlos III de Alcalá de Guadaíra tras la adjudicación del contrato a la empresa Díaz Cubero, lo que supone que el inicio de la actuación será inminente, según el Consistorio. Eso si no vuelve a retrasarse, ya que según anunció el alcalde tras la firma del convenio el año pasado, los trabajos debían haber comenzado tras el verano.
La restauración de este puente, se hace posible gracias al convenio de colaboración firmado entre el Ayuntamiento y el Ministerio de Fomento, con cargo el 1% cultural del presupuesto de Ministerio. Concretamente el presupuesto global es de 888.459,97 euros, de los que el Ministerio aporta el 75% y el Ayuntamiento el 25% restante.
La Ley de Patrimonio Histórico de 1985 establece que el uno por ciento del presupuesto total de ejecución de las obras públicas se destinará a financiar los trabajos de conservación o enriquecimiento del Patrimonio Histórico Español o de fomento de la creatividad. Las actuaciones se realizan en inmuebles declarados de interés cultural o similares.
Las obras de restauración estarán encaminadas a hacer peatonal el puente, recuperar su estado original y mejorar su estado de conservación, además de ir acompañadas de un conjunto de actuaciones adicionales como es el tratamiento de las márgenes, la resposición de servicios, acondicionamiento de accesos etc.
Según el alcalde de Alcalá, Antonio Gutiérrez Limones (PSOE) «la materialización de este proyecto supondrá la lógica creación de puestos de trabajo y permitirá formar a jóvenes para que encuentren en el campo del patrimonio, el turismo, el ocio y el medio ambiente un puesto de trabajo estable».
Al puente de Carlos III se le conoce popularmente como ‘Puente Romano’ porque la construcción, posterior al s.XV, se levantó en el lugar donde hay certeza que había una construcción romana que exteriormente no se aprecia.
Hoy en día el puente conecta la zona sur de la ciudad, de amplia expansión urbanística con la creación de nuevos barrios, no sólo con el centro sino con todo el resto de la ciudad. Además en la actualidad linda con la nueva biblioteca a las faldas de la fortaleza mozárabe y forma parte de la franja más patrimonial y turística de la ciudad, que discurre paralela al curso del Guadaíra.