Más de 15.000 personas, han visitado ya la muestra sobre el settecento veneziano en el Museo de Bellas Artes desde que se inauguró el pasado 17 de junio. La exposición estará en Sevilla hasta mediados del mes de septiembre.
La exposición, organizada por la Fundación Banco Santander y dirigida por la italiana Annalisa Scarpa, alberga una selección de 51 lienzos de uno de los siglos más brillantes de la pintura veneciana. Además estos lienzos son obras de los artistas más importantes de dicho periodo, lo que hace de esta exposición una de las más completas a la par que importante realizada en España sobre este periodo y estilo pictórico, según ha informado la Junta mediante una nota de prensa.
Las obras escogidas para cada uno de los autores, son obras precedentes de colecciones italianas, museos, fundaciones e incluso colecciones privadas, que tienen como elemento común su autenticidad. Entre los lugares de origen de dichas obras cabe destacar la Colección Terruzzi, el Mueso di Capodimonte, así como el Museo Cìvico de Vicenza que, entre otros, y sumando de las obras prestada de colecciones particulares, han permitido que el proyecto de esta ambiciosa exposición se lleve adelante.
Dicha exposición continuará en el Museo de Bellas Artes hasta el 13 de Septiembre. El precio de la entrada será de 1,5 euros y totalmente gratuito para ciudadanos de la Unión Europea acreditados, estudiantes con carné internacional y miembros del ICOM.
Algo de arte veneciano
Con Marco y Sebastiano Ricci, con Gian Antonio Pellegrini y Rosalba Carriera, el estilo y el color venecianos sedujeron a los grandes coleccionistas europeos; pero fue Jacopo Amigoni, el más internacional de los artistas venecianos, que pasando de las cortes alemanas a la corte inglesa, finalizó su vida en Madrid, tras haber sido durante cinco años pintor de corte de dos reyes españoles.
Antes de su desaparición tuvo contacto en Madrid con el que fuera seguramente el mayor talento del siglo, Gian Battista Tiepolo, al que acompañaba su hijo, Gian Domenico, destinado éste a conducir a la pintura veneciana hasta el mundo neoclásico.
La ‘veduta’ y el paisaje son las expresiones artísticas más importantes del arte veneciano, con las que se definen luces, atmósferas y un «increíble» juego de reflejos y de claroscuros: de Carlevarijs a Canaletto y Bellotto, de Marieschi a Guardi, y con Cimaroli, Zuccarelli y Zais, se recoge en las telas la transformación, la evolución y la decadencia de una sociedad artística y humana que plasmó con el pincel capítulos fundamentales del arte italiano.