Antonio Banderas con algunos de los personajes de 'El lince perdido'

FÉLIX, EL LINCE

Félix es la prueba viviente de que las leyes de Murphy pueden aplicarse al mundo animal. Si algo puede ir mal, así será. Veterano del Centro de Recuperación de Especies no hay trampa, desastre o accidente que se haya perdido. Algo que explica, al menos en la mente de este felino, por qué su especie se encuentra en peligro de extinción. Sin embargo, las circunstancias le convertirán en líder a la fuerza de un plan para liberar a sus amigos del centro de ser secuestrados por el cazador Newmann. Su mayor motivación se llama Lincesa, la hembra lince que acaba de conocer y con la que espera asegurar la existencia de su especie. Haría cualquier cosa por ella y así lo hará, aunque eso le obligue a convertirse en el más arriesgado de los aventureros.Antonio banderas con una señal que avisa a los conductores de los linces

GUS, EL CAMALEÓN

Amigo inseparable del lince Félix, Gus fue usado para experimentos científicos y desde entonces sufre graves problemas con su camuflaje, que va siempre un poco retrasado. Es serio, cascarrabias y siempre dispuesto a presumir de su sabiduría contando cientos de aventuras de dudosa credibilidad. También le puede la paranoia y acostumbrado a escuchar y a observar a su alrededor es el primero que se da cuenta de que algo no anda bien en el Centro de Recuperación de Especies. De lo que no hay duda es de su amistad por Félix después de que el lince le salvara la vida en una ocasión. Desde entonces Félix podrá encontrar en Gus a su mejor aliado para rescatar al resto de los animales secuestrados.

BEEA, LA CABRA

Loca, aventurera y atlética a esta cabra ibérica le apasionan los deportes extremos, esos que le proporcionan la dosis de adrenalina necesaria para mantener su locura. Su buena forma física y su amor por el peligro serán elementos cruciales en esta aventura. No tiene miedo a nada, pero su locura también crea problemas. Acostumbrada a pastar por su cuenta, Beea no sabe organizarse en grupo, actúa siempre sin consultar y si alguien le puede romper los nervios, ese es Gus. Pero su cabezonería también tiene su lado bueno y como ella dice “si yo os he metido en esta, yo os sacaré”.

ASTARTÉ, HALCÓN PEREGRINO

La vista de pájaro y la destreza de vuelo de Astarté será vital a la hora dar la alarma en el Centro de Recuperación de Especies donde está siendo atendida de una herida en un ala. Además este halcón hembra suele ser la voz más razonable de este improvisado “Equipo A” de animales. Por eso está en el punto de mira del cazador Newmann, dispuesto a luchar con ella en su mismo terreno y con sus mismas armas mandando a su temido halcón negro en su busca. Claro que Astarté sabrá defenderse y superar el miedo a volar que la ha producido su última caída con tal de plantarle cara al odiado cazador.

NOÉ

Es un millonario excéntrico y rodeado de misterios. Bajo su pintoresca apariencia, siempre vestido en bata y con pantuflas de conejo de peluche rosa, Noé tiene la facultad de poder comunicarse con los animales. Se trata de un don que le hizo rico de manera muy rápida buscando tesoros en el fondo del mar, bolsas de petróleo bajo la superficie de la tierra o en las carreras de caballos gracias siempre a la información privilegiada que le dan los animales. Sin embargo su deseo de darles las gracias protegiéndoles de una posible extinción le hace tomar la peor de sus decisiones cuando contrata a Newmann, un cazador sin escrúpulos, para que localice y lleve a su arca una pareja de animales de cada especie.

NEWMANN, EL CAZADOR

Su nombre siempre viene precedido por su reputación como “el mejor cazador del mundo”. No hay animal que se le resista. Eso le hace el candidato perfecto para la misión que Noé le encomienda. Aunque el contrato estipula que nada de armas letales contra los animales, Newmann acepta el reto sin dudarlo porque el negocio parece fácil y muy lucrativo, un encargo que le permitirá dedicarse a lo que verdaderamente le gusta: matar animales salvajes en la sabana africana. Además Newmann siempre disfruta demostrando la supremacía del hombre sobre todas las especies. Claro que este sofisticado cazador, siempre acompañado de un halcón negro temido por el resto de los animales, pronto descubrirá que este safari no es tan fácil como lo pintan. Y en concreto con Félix el duelo acabará siendo algo personal.

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