Después de las fiestas navideñas, recuperamos la normalidad y nos adentramos en este año con buenas sensaciones que se comienzan a respirar con los estrenos del pasado viernes y los de esta semana.
Antonio Sánchez-Marrón. Comenzamos nuestro repaso semanal a la cartelera con la nueva película de dos de los actores jóvenes más prometedores de los últimos años en Hollywood: Jake Gyllenhaal y Anne Hathaway. Amor y Otras Drogas es una comedia romántica al viejo estilo americano que, por si fuera poco, está basado en hechos reales y más concretamente, un libreto basado en las vivencias de uno de los trabajadores de la empresa que puso en marcha la pastilla llamada Viagra. Según los que han tenido ocasión de verla, lo más destacable es la química y encanto que existe entre los dos actores protagonistas, en escenas que incluso llegarán a ser muy subidas de tono.
En segundo lugar, encontramos The Green Hornet. Escrita y protagonizada por el inefable Seth Rogen, constituye uno de las cintas de superhéroes más flojos e insulsos de los últimos años. Su director, Michel Gondry, demuestra su estilo aunque sin llegar a congeniar con el espectador en ningún momento. A pesar de su reparto de secundarios, entre los que encontramos a Cameron Díaz, Tom Wilkinson o Nicolas Cage, la película ni conecta ni tiene intención de hacerlo. Y para más datos, el cambio de registro del alemán Christoph Waltz (triunfador en la pasada temporada de cine con los Malditos Bastardos de Tarantino) ni siquiera tiene interés en una cinta que no aportará absolutamente nada más que un entretenimiento mediocre.
Desde nuestro país, y tras la resaca de las nominaciones a los Premios Goya, nos llega una comedia dirigida, escrita y protagonizada por Jesús Bonilla. Su título ya nos va anunciando la trama: La Daga de Rasputín. Reuniendo a Antonio Resines, Carolina Bang, María Barranco, Andrés Pajares, Gabino Diego o Juan Luis Galiardo, Bonilla teje una trama alocada (recordemos El Oro de Moscú) producida por Enrique Cerezo y cuyo leit-motiv es una daga fabricada en el Antiguo Egipto que ha ido pasando de mano en mano a través de los siglos. Comedia española en la que no se asegura la calidad pero sí unas buenas risas. Ojo a la banda sonora del gran Roque Baños.
La película que compite por Francia a los Oscar, De Dioses y Hombres, es una cinta absolutamente soporífera en su nudo pero que comienza y finaliza de una manera magistral. Un drama religioso en el que confrontan la religión cristiana con la musulmana sirve de telón de fondo a esta cinta protagonizada por el veterano actor francés Michael Lonsdale. Con un éxito de crítica tanto en Europa como en su presentación norteamericana, De Dioses y Hombres fue estrenada con una buena acogida en la pasada edición del Festival de Cine Europeo de Sevilla.
Joel Schumacher (Última Llamada, Batman y Robin) vuelve. Que nadie se eche a temblar porque no es para tanto. A pesar de su interesante apuesta, Schumacher no se rinde ante la evidencia de que no es un buen realizador y sigue con sus dudosos métodos de realización. En esta ocasión, Chace Crawford y Emma Roberts se ponen a sus órdenes para crear esta historia que se desploma a cada minuto que pasa. Twelve es excesivamente pretenciosa para su director y la historia no está bien contada. Ni siquiera resulta reconfortante ver esta película sobre el consumo de drogas en la adolescencia.
Una película más que interesante es Animal Kingdom, producción íntegramente australiana. Animada por sus buenas críticas, esta película de corte claramente independiente, ha sido bien recibida en los círculos cinematográficos en los que se ha exhibido. Dirigida por David Michôd, mezcla de manera casi perfecta el thriller con el drama, el crimen con un espíritu de cine negro que recuerda a las más turbias películas del género.