El inicio del verano ha traído consigo la primera ola de calor en nuestro país con temperaturas superiores a los 40ºC de máxima en el centro y el sur peninsular. En este contexto, el aire acondicionado se convierte en el gran aliado de los ciudadanos, aunque tras la entrada en vigor del plan de ahorro energético, el Gobierno limitó el uso de este aparato a los 27 grados en transportes, comercios y empresas.
En este artículo, analizaremos los derechos y los límites de consumidores y trabajadores ante el uso del aire acondicionado en los centros de trabajo, espacios públicos como restaurantes o tiendas y en medios de transporte. También veremos las multas por incumplir las medidas de ahorro energético y las posibles reclamaciones que se pueden realizar en caso de incumplimiento.
Espacios obligados a cumplir el plan de ahorro energético y multas por incumplir las medidas
El Real Decreto-ley 14/2022 establece que la temperatura en los recintos refrigerados no debe ser inferior a los 27 grados. Esta norma se aplica a edificios y locales destinados a uso administrativo, comercial, de pública concurrencia y transporte de personas. Los recintos incluidos son tiendas, supermercados, centros comerciales, teatros, cines, bares, restaurantes, estaciones, aeropuertos, entre otros.
El incumplimiento de estas medidas de ahorro energético puede llevar a multas que oscilan entre los 60.000 euros por las infracciones leves hasta los 100 millones por las muy graves.
Derechos de los trabajadores con respecto al aire acondicionado en empresas
En cuanto a los trabajadores, el Real Decreto Ley 14/2022 establece una temperatura mínima de refrigeración de 27 grados en los lugares de trabajo. Sin embargo, existen excepciones para aquellos trabajos ligeros que implican un esfuerzo físico, como cocinas, gimnasios, discotecas y el interior de los medios de transporte, donde la temperatura puede estar comprendida entre los 14 y los 25 grados.
En general, la empresa debe ajustarse a los límites legales de temperatura y justificar cualquier necesidad de ajuste por debajo de los 27 grados. En caso de enfermedad o problemas de salud derivados de un uso inadecuado del aire acondicionado, el empleado puede reclamar una indemnización si se demuestra la relación de causalidad entre el incumplimiento de las normas y los daños causados.
Reclamaciones de los consumidores
Si un consumidor considera que un establecimiento no respeta los umbrales de temperatura establecidos por la normativa, puede solicitar una hoja de reclamaciones y presentarla en el Organismo de Consumo correspondiente. El establecimiento puede recibir sanciones por incumplimiento de la normativa.
En el caso de alojamientos hoteleros sin aire acondicionado, la obligación de disponer de climatización varía según la normativa autonómica. En general, si el hotel no cumple con dicha obligación, el huésped puede solicitar una hoja de reclamaciones y presentarla en la Dirección General de Turismo de su Comunidad Autónoma para iniciar un proceso de reclamación.
Es importante destacar que, en situaciones de ola de calor extrema, las autoridades pueden flexibilizar temporalmente las medidas de ahorro energético y permitir un uso más intensivo del aire acondicionado. En estos casos, se busca proteger la salud y el bienestar de la población, priorizando la prevención de golpes de calor y otros problemas de salud relacionados con el calor excesivo.
Además, es fundamental que tanto los empleadores como los propietarios de establecimientos públicos y comercios adopten medidas adicionales para garantizar el confort y la seguridad de las personas durante las olas de calor. Esto puede incluir la instalación de sistemas de climatización más eficientes, la mejora de la ventilación, el uso de cortinas o persianas para bloquear la radiación solar directa, y la provisión de agua fresca y espacios de descanso adecuados.
En resumen, durante las olas de calor, se establecen medidas de ahorro energético que limitan el uso del aire acondicionado a una temperatura máxima de 27 grados en diversos espacios públicos y de trabajo. Tanto los trabajadores como los consumidores tienen derechos y pueden presentar reclamaciones en caso de incumplimiento de estas normas. Sin embargo, en situaciones extremas, las autoridades pueden permitir el uso intensivo del aire acondicionado para proteger la salud de las personas. Es importante estar informado sobre la normativa específica de cada comunidad y tomar medidas adicionales para asegurar el confort y la seguridad durante las olas de calor.