La capital de Andalucía, la Ciudad de las Luces. Sevilla es uno de los lugares más emblemáticos de España, una ciudad repleta de encanto con rincones sorprendentes, callejones por los que perderse y mil y una historias que descubrir. Turistas de todas partes del mundo acuden aquí para descubrir la esencia del encanto andaluz.

Pero la mayoría acude siempre a los mismos destinos. Una vez se han asegurado sus noches en cualquiera de los mejores hoteles en Sevilla, proceden a visitar los lugares más conocidos: la Giralda, la Torre del Oro, la plaza de España, el Alcázar… Son visitas obligatorias, por supuesto, pero hay otros rincones secretos de Sevilla que no aparecen en las guías y que enamoran a todo el que los descubre. ¿Cuáles? Eso es justo lo que vamos a ver aquí.

Los rincones secretos de Sevilla

Vamos a empezar por una de las localizaciones más famosas de Juego de Tronos y, a la vez, más desconocidas para el público general: Atarazanas. Entre sus muros se cuenta la historia de los navíos que se construyeron entre los siglos XIII y XV, ya que hablamos de uno de los lugares más importantes para la industria naval de la Corona de Castilla. Acogió a 17 naves de las que ya solo quedan 7, pero no deja de ser abrumador.

De aquí vamos a pasar a un destino mucho más conocido, la Catedral de Sevilla, aunque vamos a quedarnos con uno de sus secretos. Y es que, ¿sabías que la catedral sevilla esconde varios objetos ocultos? En concreto hay cuatro que son muy especiales y está en el Patio de los Naranjos. Si lo visitas, busca el colmillo de elefante, el bastón de mando, el freno de caballo y el cocodrilo de madera. ¿Por qué están ahí? Si logras resolver el misterio, serás la primera persona del mundo que lo hace.

Siguiendo con esta ruta de secretos, hay que dirigirse a la Avenida de la Constitución. Sí, por supuesto que es un lugar archiconocido, pero en su interior alberga una plaza conocida como la Plaza del Cabildo. Un lugar muy atractivo que se mantiene activo como sede de numismática y filatelia.  Desde aquí puedes buscar la avenida Eduardo Dato para visitar la Fábrica de Artillería, fundada en el siglo XVI y declarada BIC (Bien de Interés Cultural) por sus bóvedas, casas ajardinadas e historia.

¿Y por último? Dicen que no hay despedida sin beso, así que toca visitar el Callejón del Beso. Se trata de la calle Reinoso, que se encuentra en el barrio de Santa Cruz. Se la conoce como el callejón del beso porque tiene una anchura de tan solo 103 centímetros, lo que permitía a los enamorados que vivían en ella darse un beso desde sus balcones.

Estos cinco son los rincones y lugares secretos más fascinantes de Sevilla, aunque debes saber que hay muchos más lugares que no aparecen en las guías, y que hacen de esta capital global un lugar de lo más carismático y, por supuesto, totalmente inolvidable.