Una plataforma afectados critica las carencias de seguridad que se producen ya en el montaje antes de su celebración.
La Plataforma de Afectados por la Feria de Tomares muestra «su repulsa y rechazo a la ubicación, por segundo año consecutivo, de la feria sin ningun tipo de consenso político y ciudadano» e insisten en que la decisión tomada «unilateralmente» por el gobierno del Partido Popular en solitario.
«Un año mas tendremos que soportar molestias, que el año pasado incluyeron allanamientos de domicilios por parte de la contrata municipal, ruidos y continuas faltas de civismo en nuestras calles y para que el impacto en nuestra salud y animo no llegue a las desagradables cotas de año pasado un grupo de vecinos nos hemos organizado para denunciar la cacicada que supone la actual ubicación y las múltiples chapuzas y carencias de seguridad que observamos y que se producen ya en el montaje, antes de su celebración», explican en un comunicado.
Denuncian que la estructura de la feria, levantada ya hace varias semanas, «carece de las mas elementales medidas de seguridad al no estar fijada al suelo, solo apuntalada, para que se mantenga en pie y estan unidas por bridas de plástico incumpliendo todas las normas de seguridad y existiendo la posibilidad, en caso de imprevisto meteorológico o similar, de desplazamiento o caída con el consiguiente riesgo para las personas».
«Los vecinos estamos asombrados que un ayuntamiento que vende la calidad y excelencia de sus servicios actué instalado en la chapuza y el desprecio a los vecinos».