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La Hermandad de la Divina Pastora de Cantillana celebra, de nuevo, «Belén se ha convertido en un pueblo pastoreño». La curiosidad de este belén viviente es que es el único compuesto de escenas estáticas, es decir, es una representación inmóvil. Es el único de toda la provincia y pone fin a estas representaciones.
El evento lleva celebrándose desde 2018. En esta representación se pueden encontrar pastores, animales, ángeles, Reyes Magos, y la gran mayoría de escenas habituales en estas. Sin embargo, no hay movimiento.
De esta forma, la hermandad ha conseguido organizar un belén como el que cualquiera puede instalar en su casa, pero con figuras de carne y hueso. Del mismo modo, los actores, adoptan una misma postura, que mantienen de forma invariable durante la función de cada día. En esta línea, de este estatismo se deriva la ausencia de narración y diálogos, ya que la actuación se basa en permanecer inmóvil.
De este Belén viviente destaca de forma especial su plasticidad. Cada escena está cuidada hasta el mínimo detalle, desde las vestimentas a la decoración y ambientación de cada pasaje. Orfebrería, barro y cerámica, ricas telas, candelabros, aperos, utensilios de cocina, mobiliario y alfombras se conjugan creando vistosas escenas que no dejan indiferente al espectador. Pero, a parte del atrezo, también por la posición y colocación de los personajes ya que, al no haber relato ni explicación de ningún tipo, la expresividad inmóvil de cada persona actuante ejerce como narración de la historia.
La aldea de la Divina Pastora de Cantillana como escenario del belén inmóvil
Cantilla no solo cuenta con curioso un belén inmóvil, sino que, además, el escenario en el que se desarrolla también es peculiar. Concretamente, el espacio elegido es la aldea de la Divina Pastora de Cantilla. Este pequeño poblado nació para la celebración de la anual romería que cada año pone el broche de oro al mes de septiembre en la localidad sevillana. Esta está presidida por la ermita dedicada a la Virgen y cuenta con casas erigidas para la convivencia, con porches abiertos y arquitectura de estilo regionalista y tradicional andaluz.
Las escenas aprovechan esa particular configuración, haciendo de los porches de las casas grandes lienzos, vivientes y estáticos, que relatan la historia. Tanto es así que podría compararse con un museo al aire libre dedicado a narrar el nacimiento del Señor mediante grandes cuadros pintados con personas.
250 pastoreños y un paseo por la vida de María
La representación cuenta con 250 pastoreños de todas las edades. Estos serán los encargados de dar vida a las 22 escenas que compondrán esta sexta edición.
Asimismo, como rasgo característico propio, «Belén se ha convertido en un pueblo pastoreño» no se circunscribe al nacimiento del Mesías. El paseo por este museo comienza con pasajes de la vida de la Virgen María, con escenas como «La Natividad de la Virgen» y «La infancia de la Virgen». La anunciación a María, el sueño de José, la visita a Isabel, la búsqueda de posada, la anunciación a los pastores y el Nacimiento serán algunas de las siguientes.
Cada edición cuenta con nuevas escenas de la infancia del Señor
Otra de las señas de identidad de este Belén viviente es que no finaliza con el nacimiento del Niño Jesús y la adoración de los Reyes, sino que en cada edición se añaden escenas posteriores de la infancia y el inicio de la vida pública del Señor, algo exclusivo de esta representación. En esta serán las cinco últimas escenas las posteriores al nacimiento: la infancia del Mesías, representada por el Niño Jesús jugando con su primo San Juan; el Niño Jesús entre los doctores; el regreso de Egipto; la Sagrada Familia y el Bautismo del Señor.
Para dar continuidad al paseo por este museo vivo del Nacimiento, se entremezclan también escenas costumbristas y de labores de artesanía. Un telar, el río y los pescadores, una alfarería, una platería, una bodega o una fuente son otros de los cuadros que podrán contemplarse en esta singular exposición.
Horarios y venta de entradas en Cantillana para el belén inmóvil
El espectáculo podrá visitarse tanto el día 28 de diciembre de 17:00 horas a 19:00 horas como el 29 de 16:30 horas a 19:00 horas. Por otro lado, las entradas, con un precio de tres euros, podrán adquirirse de forma anticipada en la Casa Hermandad de la Divina Pastora los martes y jueves de 19:00 a 20:30 horas. Asimismo, podrán comprarse también en la joyería El Toisón en horario comercial, y por vía telefónica en el 682 630 550.
Los días de la representación podrán comprarse en la taquilla, aunque con un precio de cinco euros. Asimismo, la visita puede acompañarse con la degustación de dulces típicos del pueblo y de las fechas en el ambigú que se abrirá en la explanada de la ermita. Por último, el domingo, desde las 15:00 horas, la Zambomba de la Divina Pastora de San Dionisio de Jerez de la Frontera amenizará la sobremesa hasta la hora de inicio.
La visita a la aldea de la Divina Pastora los días 28 y 29 de diciembre será la mejor forma de poner el final a la ruta de belenes que salpica la provincia a lo largo del mes. A las puertas del nuevo año, el broche perfecto a la Navidad será el nacimiento pastoreño que, con figuras inmóviles, celebra la venida del Niño Jesús.