La ciudad de Sevilla no faltó a una de sus citas más importantes de la Semana Santa, con un aluvión de mujeres de mantilla visitando templos. Ni la pandemia de la COVID-19, ni las largas colas impidieron a las sevillanas pasearse por la ciudad con las tradicionales mantillas del Jueves Santo.
Ni las largas colas en los templos, ni la pandemia de la COVID-19 que estamos viviendo, ni la ausencia de cofradías en las calles impidieron que las mujeres sevillanas vistieran el hábito tradicional del Jueves y Viernes Santo. Para evitar la imagen de una ciudad sin mantillas, la Asociación Qlamenco lanzaba la pasada semana una campaña para promocionar esta vestimenta.
El “La Mantilla, Sevilla del dolor a la alegría” tiene como objetivo principal hacer un homenaje a la mantilla. A través de un recorrido por los dos momentos de mayor exaltación de esta prenda artesanal. La Mantilla negra, sinónimo de luto y recogimiento, tan característica de la Semana Santa. Y la mantilla blanca, símbolo de júbilo y alegría, presente en las ceremonias más tradicionales.
La próxima cita con la Mantilla será el jueves, 8 de abril, con la jornada “Origen y evolución de la mantilla en Sociedad” en la sede de la Fundación Cajasol.
Los actos, que se podrán seguir en directo a través de redes sociales, incluyen una mesa redonda con expertos en la mantilla. Una master class para enseñar a ponerse esta prenda y una exposición de fotografías. El broche de oro de esta iniciativa será un recorrido en coche de caballos de mujeres vestidas de ceremonia ataviadas con mantilla blanca.