La Audiencia de Sevilla ha condenado a dos años de cárcel a una mujer por un delito continuado de abuso sexual cometido sobre una menor de 14 años de edad. La acusada, quien mantuvo una relación sentimental con la víctima, realizó «tocamientos en la zona genital y los pechos» a la chica a sabiendas de su edad.
En la sentencia del 24 de junio, la Sección Tercera de la Audiencia de Sevilla declara probado que ambas se conocieron en junio de 2021. Las partes del procedimiento judicial llegaron a un acuerdo y la acusada lo reconoció. La acusada conoció a la víctima, de 14 años, en un parque de la localidad. A partir de ese momento, inició una relación sentimental con pleno conocimiento de la edad de la chica.
Según el informe, la relación se prolongó hasta octubre del mismo año. «La menor decidió romper la relación debido al control continuo de la acusada. La acusada intentaba conocer su paradero y movimientos en todo momento. Incluso le indicaba la ropa que debía ponerse».
«A lo largo de los cuatro meses que aproximadamente duró la relación, la acusada mantuvo relaciones sexuales con la menor en un número de ocasiones sin concretar, en las que le efectuó tocamientos en la zona de genital y también en los pechos, aunque sin llegar en ningún momento a penetrarla con objeto o parte corporal alguna», expone el relato de hechos probados.
La sentencia también declara probado que, antes de la ruptura en octubre de 2021, la acusada intentó disuadir a la menor «diciéndole que se mataría si la abandonaba». Incluso llegó a mostrarle fotos de lesiones que se había causado a sí misma.
Tras la ruptura, la acusada trató de contactar con la menor en varias ocasiones. Usó números ocultos y nuevos perfiles en redes sociales, ya que la menor la había bloqueado en todas, tanto en WhatsApp como en Instagram, para evitar cualquier relación. La acusada incluso intentó enviar mensajes a través de amistades en común. El relato de hechos probados declara que la acusada ha consignado 1.500 euros a favor de la perjudicada.
El tribunal condena a la acusada a dos años de prisión por un delito continuado de abuso sexual con la atenuante de reparación del daño. Además, se le prohíbe contactar o comunicarse con la menor durante dos años. También impone cinco años de libertad vigilada post penitenciaria y una indemnización que la acusada ya ha adelantado.